Política

ORIGENES DEL CORRECTISMO POLITICO

Por Elvis Occ.-

En una de mis constantes búsquedas en internet de material relacionado a la contaminación marxista en todas las áreas de expresión humana, choque con un artículo que recoge las ponencias de William S. Lind al respecto. ¿Y quién es William S. Lind? Este escritor americano es uno de los totalmente convencidos que la batalla cultural la viene ganando el marxismo, tal como lo recomendara Antonio Gramsci. Como notarán más adelante, Bill Lind no guarda ninguna simpatía para con la izquierda. El articulo esta en inglés y he traducido lo que en mi humilde opinión es lo más importante e interesante de su teoría sobre el origen del correctismo político.

Bill Lind se pregunta: ¿De dónde viene todo eso que escucharon esta mañana –el feminismo victimiza, los derechos gays, las estadísticas inventadas, la historia reescrita, las mentiras, las exigencias y todo lo demás- de dónde?”

Y Bill Lind continuo relatando lo que hoy acontece en una sociedad tan acostumbrada a cuestionar todo y todos… “Por primera vez los estadounidenses tenemos temor de lo que decimos, de lo que escribimos, de lo que pensamos. Debemos tener cuidado de usar el término equivocado, palabras denunciadas como ofensivas, insensibles, racistas, sexistas u homofóbicas…”. Bill admite que aparecieron en las universidades para después esparcirse por todos los rincones y se pregunta nuevamente, pero donde se originó.

Es lo “Políticamente Correcto”, así lo llamamos. El nombre se originó como algo chistoso, literalmente como una tira cómica y aun hoy todavía lo vemos como algo casi serio. De hecho es mortalmente serio. Es la gran peste del siglo. Es la peste que ha ocasionado decenas de millones muertos…”. Este veterano historiador va más allá y afirma lo que ya muchos habíamos sospechado. Correctismo Político es Marxismo cultural. Es marxismo trasplantado de lo económico a lo cultural. (…) Si comparamos los postulados básicos del Marxismo clásico con el Politicocorrectismo, los paralelos son obvios”.

Y entonces el viejo Lind enumera sus conclusiones:

Primero que nada, Politicocorrectismo y Marxismo son ambos totalitarios por naturaleza. En ningún lugar se puede ver eso con más claridad que en los campos universitarios. Que no se le ocurra a algún profesor o estudiante cruzar la línea trazada por las feministas, activistas gay, de alguna minoría racial o algún otro grupo de “victimas” santificadas porque los enjuician. La misma Universidad los juzga y condena.

 

Segundo. El marxismo cultural del correctismo político, como el marxismo económico, tiene una sola razón para explicar la historia. El marxismo dice que la historia lo determina el que posee los medios de producción. El marxismo cultural o correctismo político dice que el que tiene el poder determina que es raza, sexo etc. para el resto de los demás. Nada más importa.

Tercero. Como en el marxismo económico, algunos grupos como los obreros y los campesinos son buenos a priori. Los demás como los burgueses y capitalistas con malos. El marxismo cultural o correctismo político, también tiene grupos buenos como el feminista, homosexual etc. Ellos son las víctimas y por ende automáticamente bueno, sin importar lo que ellos hagan.

Cuarto. El marxismo económico y el marxismo cultural se basan en la expropiación. Cuando los marxistas, los comunistas tomaron el poder en Rusia, ellos expropiaron a los burgueses se quedaron con sus propiedades. Igualmente cuando los marxistas culturales se apoderan de una Universidad, lo expropian a través de cuotas de ingreso. Cuando a un estudiante con mejores calificaciones se le niega el ingreso a la Universidad para dar espacio a un estudiante negro o hispano con calificaciones paupérrimas, está siendo víctima de una expropiación. Y claro, Acción Afirmativa, en nuestra sociedad como un todo, es un sistema expropiador. Una empresa cuyos dueños sean blancos no obtienen contratos porque está reservado para empresas cuyos dueños sean hispanos o mujeres. Así que el marxismo es la herramienta expropiatoria para ambos.

Bil Lind casi concluye diciendo que el análisis de inspiración marxista es dominante ahora también en el terreno cultural…

Finalmente ambos tienen métodos de análisis que les da automáticamente las respuestas que quieren. Para los marxistas clásicos es el marxismo económico y para el marxista cultural es la deconstrucción. La deconstrucción básicamente es tomar cualquier texto, despojarla de todo sentido y reinsertar el sentido que quieras darle. Así es como supuestamente la obra de Shakespeare es toda supresión femenina y la Biblia versaría sobre razas y géneros.

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