MÁS SOBRE LOS BAÑOS TRANS DEL AEROPUERTO DE LIMA
Al parecer el concesionario del aeropuerto está obsesionado con cuestiones ideológicas yendo incluso contra la ley, mientras descuida el servicio que debe brindarnos.

Por: Luciano Revoredo
Luego de que Ositrán, se pronunció pidiendo el cierre de los baños “trans” en el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez y la instalación de baños normales para hombres y mujeres, la empresa Lima Airport Partners (LAP) no sólo no acató la medida dictada por el órgano rector del ámbito al cual pertenece su rubro empresarial, sino que regresó con una medida mucho más ideológica que la anterior. La pregunta que surge hoy es: ¿esta es una iniciativa corporativa que viene desde su comité ejecutivo o es solo un tema de la agenda del Comité de Diversidad e Inclusión con el que cuenta la empresa en Perú?
La nueva señalética de los baños dice “Mujeres en su diversidad” y “Hombres en su diversidad”, las casi crípticas definiciones merecen una explicación y para eso hay en cada puerta un código QR que pretende aclara la equívoca situación.
Al entrar al QR del baño de “Mujeres en su diversidad” se lee lo siguiente: “Incluye a las niñas, adolescentes, adultas y adultas mayores; mujeres indígenas, nativas, originarias, afrodescendientes y mestizas; mujeres urbanas y rurales; mujeres heterosexuales, mujeres lesbianas, bisexuales, trans e intersex; mujeres con discapacidad física o mental; mujeres migrantes, refugiadas y desplazadas internas; mujeres viviendo con VIH; entre otras”. En el de hombres dice lo mismo adaptado de acuerdo con los delirios propios de esa enfermedad mental que llaman progresismo.
Según la Memoria integrada 2022 de LAP (https://lima-airport.com/cms/corporativo/enfoque-de-sostenibilidad), los miembros del Comité Ejecutivo de Lima Airport Partners está conformado por los siguientes miembros.

La empresa concesionara del principal aeropuerto del Perú tiene como una prioridad “participar de la marcha del orgullo”, una “formación del círculo de mujeres” y tiene un “seguro para parejas diversas”. Mientras tanto, los vuelos se atrasan, el aeropuerto ha colapsado de la cantidad de gente y los baños están sucios todo el tiempo y las obras del nuevo terminal tienen 20 años de atraso. ¿Es esta la calidad que debe tener un aeropuerto tan importante como el de Lima?
Según el Informe de desempeño de LAP que realizó Ositrán en 2022 (https://www.ositran.gob.pe/anterior/wp-content/uploads/2023/07/id-lap-2022.pdf)
El aeropuerto no cumplió con ninguno de los niveles de servicio de los procesos de Check in, auto Check-in ni recojo de equipaje internacional. Asimismo, se observa que el único proceso en el que se ha cumplido con los dos niveles de servicios medidos es en el de control de seguridad internacional, donde se cumple con el área mínima 1m2 por pasajero y el tiempo máximo de espera (10 minutos).
Esta es la realidad del aeropuerto Jorge Chávez en manos de una empresa concesionaria que abandona sus responsabilidades para dedicarse a difundir ideologías perniciosas.
Ya es tiempo que la ciudadanía haga saber su rechazo a esta empresa.
A quien se debe rechazar es a los que aceptaron las prórrogas en los contratos de concesión y la otra cosa es que los funcionarios son extranjeros a las órdenes de otros extranjeros que a buen seguro serán los de las grandes administradoras internacionales de fondos tipo blackrock vanguard state street, entre otros. Y saben que si quieren más dinero tienen que poner más empeño en la degeneración. Hasta la cantada por Suárez Vertiz, degeneración total.