Por: Alberto Bendezú Torres
Nos hemos informado que JDP pretende ahora hacernos creer que, luego de haber fracasado en la Fiscalía anticorrupción para el Caso Odebrdcht, sin haber acusado en 5 años a ningún investigado; habiendo realizado pesquisas, operativos de allanamientos y abusivas prisiones preventivas, especialmente a sectores de la oposición democrática; ahora concursa para cumplir otro papel de Juez Superior como un galardón más en su negativa y politizada trayectoria profesional que imprimió en el Ministerio Público.
Como todos sabemos JDP cumplió a cabalidad el papel de persecución, no del delito; sino a sectores de la oposición y que, en las más de dos décadas últimas, blindó a gobiernos que junto a Odebrecht saquearon al país; habiéndose, éste personaje nefasto, encargado de blindar a los operadores corruptos; que, vestidos de autoridades gubernamentales, saquearon nuestras arcas fiscales y el patrimonio del país.
El papel que cumplió fue perseguir y meter a prisión preventiva a todo aquel que se atrevía a cuestionar y relanzar trabajo de oposición contra los gobiernos corruptos y ladrones, y no dudó en usar la justicia para politizarla; y, desde ese poder, atacar en campañas políticas demoledoras en procesos electorales generales; acusando y denigrando candidaturas de los sectores democráticos y partidos políticos de oposición.
Cumplido este papel con éxito; porque, efectivamente, hoy reina la impunidad de Susana Villarán, Vizcarra , Toledo, Humala y PPK, propiciando, arteramente, el alargamiento de los procesos, para que muchos delitos caduque o caigan entrando en prescripción.
Cumplido esa papel de manera gloriosa y con logros de notoriedad (“hombre del año”), propuesto por la mafia y cartel periodístico caviar, ahora le encargarán otro papel demoníaco dándole otro poder; que ya no será de perseguir y acusar a la oposición. Ahora, el nuevo rol que pretende; y, no debemos permitirlo, es de no sancionar ni juzgar a los amigos políticos de la sucia cantera de la progresia corrupta en nuestro país. Recordando que él no participó en la extradicion de Toledo; es hora de señalar con fuego, arrinconar y denunciar a éste sicario y su nuevo papel que no debemos permitir
