¡A TI TE LO DIGO VIZCARRA! ¡ERES SINÓNIMO DE CAOS Y DESASTRE TOTAL!

Por: Luis Yunis

Martín Vizcarra, hay un refrán que señala lo siguiente: “El que dice la verdad, ni peca ni miente”, y haciendo uso de mi libertad de expresión amparado en la Declaración Universal de los Derechos Humanos y en la Constitución Política del Perú te diré algunas verdades que seguramente ni te importaran, pero espero que tu servicio de inteligencia te lo haga conocer. Y te lo digo en muy buena onda.

Si fueras de barrio, te diría: “¡Eres un huevón, estás solo con la pelota frente al arco y no has hecho el puto gol!”. Pero como te has refinado y ya te olvidaste de que hacías taxi te lo diré de otra manera: Vizcarra, sea como fuere que llegaste, eres el presidente de la Nación, tienes TODO el control del aparato estatal, con unas Fuerzas Armadas y una Policía Nacional a tus órdenes y con el presupuesto suficiente para haber cambiado el país hace rato, pero, ¡no has hecho nada, absolutamente nada, al contrario, estás destruyendo el país! En mi barrio se dice: “La estás cagando”.

De las veinticuatro atribuciones y obligaciones constitucionales que tienes para haber cambiado positivamente el país de tus padres y el país que será de tus hijos, increíblemente y sin un Congreso que te esté husmeando no has podido ni siquiera cumplir el Decreto Supremo No. 056 – 2018 – PCM del 23 de mayo del 2018 que tú mismo firmaste y que señalaba tu política general de gobierno, que objetivamente se desarrollaba sobre cinco ejes:

1. “Integridad y lucha contra la corrupción”. ¡Completamente falso! ¿Has sido integro en decirnos la cifra real de muertos por la pandemia? Bien sabes que ello colinda con el delito. ¿Puedes mirarnos a los ojos y decirnos que has sido decente y honrado cuando el nepotismo y el favoritismo cuenta con tu aval, así como los contratos a dedo?

2. “Fortalecimiento institucional para la gobernabilidad”. ¡Absolutamente un fracaso! Bien sabes que no hay un solo punto de eficacia en la articulación con los tres niveles de gobierno y que cada quien hace lo que se le da la gana y eso se llama ingobernabilidad, desorden y ausencia de liderazgo.

3. “Crecimiento económico equitativo, competitivo y sostenible”. ¡Totalmente nefasto, por no decir catastrófico! Y no le eches la culpa a la pandemia, porque dejándote llevar y aceptar una influencia de pensamiento antidesarrollo, has dejado de lado los grandes proyectos mineros, sociales y sostenibles, causando retraso, pobreza, miseria y penuria. ¡Tú insensibilidad e indiferencia a los problemas sociales es enfermizo!

4. “Desarrollo social y bienestar de la población”. ¡Un fiasco, una desilusión y una decepción! Se entiende como desarrollo social la evolución y el mejoramiento en las condiciones de vida de los individuos dentro de una sociedad, y el bienestar se traduce en que tus carteras ministeriales funcionen adecuadamente para brindar comodidad y seguridad a esa colectividad, pero hemos retrocedido alarmantemente en todos los rubros. ¡Ninguno funciona apropiadamente!

5. “Descentralización efectiva para el desarrollo”. ¡Un fracaso más! Tú sabes que la descentralización implica un proceso técnico que debería haberse efectuado desde un inicio como parte de la reforma de tu gobierno, pero todo sigue igual y peor, lo que conlleva al viejo dicho de: “A rio revuelto, ganancia de pescadores”, ¡con tu aval!

Finalmente, en cuanto a tu responsabilidad de “Velar por el orden interno…”, articulo 118, inc. 4 de la Constitución Política del Perú, debo decirte en términos criollos “de que estás hasta las huevas” y eso significa que te importa un carajo tratar de solucionar un tema que es fácil de resolver, pero como tú sabes que es más fácil distraer la atención de tu fracaso gubernamental hacia el delito popular, por ello has abandonado a la sociedad a merced de la delincuencia para que los titulares y los medios de comunicación solo hablen de crímenes, asaltos, robos y violaciones, lo cual lo tienes fríamente calculado porque así es tu biotipo leptosómico.

¡Ni siquiera has respetado lo que tú mismo has firmado, por lo tanto, no tienes derecho a exigir respeto y lamentablemente pasarás a la historia convertido en un fracaso y por todo ello te digo abiertamente, que eres un sinónimo de caos y desastre total para mi país, por el cual luché y estuve dispuesto a dar mi vida en los aciagos tiempos del terrorismo y que ahora me duele verlo a la deriva con militares cumpliendo órdenes de vestirse de rosado y con mis hermanos policías haciendo malabares para capturar a tanto indeseable para que al final sean puestos en libertad por algunos fiscales y jueces mediocres, y todo ante tu atenta y cómplice actitud!

Finalmente, tu campaña de “El covid no mata solo. No seamos cómplices” es completamente absurda, es totalmente desatinada y lejos de lo que se requiere. Estás pecando de indolente, de insensible y te estás convirtiendo en despreciable. En mi barrio se dice: “No seas gil, pareciera que no conoces tu gente”. Esto es un asunto de entender nuestra idiosincrasia, de comunicación al máximo, de educación y de muchísima acción cívica. ¡No es un tema de represión y de amenazas a tus propios compatriotas!

Lo siento mucho, pero la verdad es la verdad, me hubiera gustado escribirte resaltando tus logros, decirte que tu pueblo está relativamente feliz; al menos decirte que hemos mejorado respecto al gobierno anterior o gobiernos pasados, pero realmente estamos en caída libre y la llegada del bicentenario será para llorar.