Política

HACE TREINTA AÑOS LLEGÓ AL GOBIERNO ALBERTO FUJIMORI

Por: José Romero

Se han cumplido treinta años del sorpresivo triunfo electoral de Alberto Fujimori. Nadie vio su irrupción en la competencia electoral sino hasta pocos días de la primera vuelta en el mes de abril de 1990. El Perú era un polvorín y la crisis social, económica y política había calado al punto que éramos casi inviables como país

Esto no era gratuito, ni menos no habían corresponsables  Todo empezó con el desastroso gobierno acciopopulista, continuó con el Velascato, los insuficientes esfuerzos de la segunda fase del Gobierno Militar (1975-1980), el segundo belaundismo y el caos e impericia de un mozallón, cómo alguna vez  llamó Luis Alberto Sánchez a Alan García.

El Perú hizo suyo el mensaje de Alberto Fujimori, quién fue el gran arquitecto del entonces reconocido internacionalmente milagro peruano. Reconstruyó la economía y derrotó al terrorismo. Ello es lo que no le perdonan los cómplices y remanentes del terror. Atento Phillip Butters, no es lo que usted sostiene respecto a la carcelería del Presidente Fujimori. Él purga  carcelería por la farsa de Barrios Altos y la Cantuta y no por otra cosa.

Entre julio de 1990 y abril de 1992 los responsables del desastre y que habían gobernado el país desde 1980 hasta 1990 no lo dejaron desarrollar una serie de medidas, razón por la cual se produjo la decisión del 5 de Abril, medida necesaria, trascendental, única, y que debe ser evaluada en su contexto histórico

Los frutos de ello (jueces sin rostro y otras políticas) permitieron el descabezamiento de las cúpulas terroristas y su derrota.

Sería mezquino no reconocer que no estuvo solo en esa tarea. En esa época había muy buenos ministros que trabajaron 24/7 (no como hoy) “al ritmo del Chino”. Cito cinco para no extenderme: Juan Carlos Hurtadoe, el primer MEF que tuvo el coraje de tomar las medidas del 8 de agosto de 1990; el ejecutor del plan de reconstrucción económica, Carlos Boloña; el ingeniero del milagro agrario Absalón Vásquez; el hombre de la pesca Jaime Sobero y la mujer de hierro Lucha Cuculiza.

Dos logros adicionales queremos resaltar. La Paz con el vecino Ecuador y la colosal Operación Chavín de Huántar.

En el Congreso se puede resaltar las figuras de Luz Salgado, Martha Chávez y Carmen Lozada y en la última etapa (2000-2001), el propio Absalón Vázquez, el brillante jurista Fernán Altuve, el Maestro Pablo Macera, Joaquín Ormeño, Elsa Vega y Gustavo Ibarra.

Cientos de colegios, decenas de hospitales y postas, miles de carreteras asfaltadas, obras de irrigación, obras de agua, saneamiento, electrificación y acceso a la telefonía, lucha contra la pobreza y sobre todo paz.

El camino tuvo baches, contratiempos y errores. Uno de los mayores fue haber dado relativa cabida a un sector que se abrió paso cual mala hierba: el caviar; que impulsó la malsana ideología de género.

Otro gran error es no haber impulsado con decisión las llamadas reformas de segunda generación. También hay que señalar el proceso de su reelección en el año 2000 que culminó con su renuncia a pocos meses de haber asumido un tercer mandato.

El pueblo y en particular el Perú profundo y los pobres, recuerdan con cariño y gratitud al Chino. Creo que él ya pagó sus errores y los de algunos de sus colaboradores.  Ya es hora de su libertad.

La justicia humana cometió con él un abuso jurídico pero la historia ya lo ha absuelto y Dios será misericordioso, no me queda duda, con un hombre que dedicó diez años de su vida en favor de los peruanos con dedicación espartana.

La mezquindad de algunos querrá robar peso en la balanza del juicio político pero las evidencias están ahí. Hoy soportamos este terremoto porque los cimientos que puso el Chino son indestructibles. Ni el rojerío, el caviaraje, los liberales proaberrantes o los socialconfusos podrán destruir de la memoria del Perú  la obra del Presidente Constitucional 1990-2000 Alberto Fujimori Fujimori.

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