GRAN PRESIÓN INTERNACIONAL EN FAVOR DEL FRAUDE DEL COMUNISTA CASTILLO
Por: Luciano Revoredo
Como se sabe existe una potente red internacional del progresismo que actúa sin pausa. Controlan medios de comunicación y organismos internacionales. Son por una parte los activistas que viven de las oenegés financiadas por una élite trastornada, los funcionarios públicos al servicio del globalismo y las organizaciones abiertamente al servicio del comunismo, el castrochavismo y el narcotráfico. Todos estos agentes políticos nos tienen ahora en la mira y harán lo que esté a su alcance para consolidar el fraude que llevará a la presidencia al comunista y aliado del terrorismo Pedro Castillo.
El Perú es fundamental en su agenda. Somos el último eslabón de la cadena que busca esclavizar Iberoamérica bajo el infame yugo del comunismo asesino y cleptocrático. Desde los tiempos primigenios de la tiranía castrista, los crímenes de aquel demente y asesino en serie que fue el Che Guevara, los fracasos de Velasco y Allende, los excesos de genocidas como los sandinistas Tomás Borge y Daniel Ortega, la destrucción de Venezuela en manos de Chávez y el gorila Maduro, la rampante corrupción de Rousseff y Lula, el latrocinio organizado de los Kirchner y el intento homicida de tomar el Perú por Sendero Luminoso y el MRTA, la izquierda siempre ha sido la misma. Mendaz, homicida y delincuencial. Sin excepciones.
Esta izquierda es la que en 1990 se intentó colocar una máscara que le permitiese relanzarse. Asumir una imagen renovada. Es así que se creó el Foro de Sao Paulo, esa movida dio un nuevo impulso a la fracasada izquierda de siempre. Pero se repitió la historia de fiascos y frustraciones. Los gobiernos que asumieron agitando las banderas del socialismo del siglo XXI se hundieron en el fango de la corrupción de sus falsos ídolos. Sus caudillos eran como siempre sinónimo de podredumbre y desilusión.
Ante tal pérdida de credibilidad se pusieron otra careta. Son ahora el Grupo de Puebla, que se lanzó en esa ciudad mexicana en 2019 y si el Foro de Sao Paulo fue un engendro al alimón de Lula Da Silva y Fidel Castro, el Grupo de Puebla lo es ahora del patibulario Lula y Raúl Castro, el hermano de Fidel.
A estas siniestras organizaciones se suma la Internacional Progresista, organización conformada por líderes socialistas norteamericanos y europeos. Cuenta entre sus dirigentes a Baltazar Garzón (España), Rafael Correa (Ecuador), Celso Amorim (Brasil), Álvaro García Linera (Bolivia), Gustavo Petro (Colombia) y el excandidato presidencial demócrata de los Estados Unidos Bernie Sanders.
Estas organizaciones son la élite que promueve las ideas trasnochadas de la izquierda y la implantación del comunismo.
Es estos momentos se están moviendo en las más altas esferas del poder, presionando en la ONU, la OEA, el Departamento de Estado de los EE.UU., la Unión Europea, etcétera. Van dando pasos lentos pero seguros. Presionan, chantajean, extorsionan y consiguen pronunciamientos para sellar el fraudulento triunfo de Castillo.
Esa es nuestra realidad. En este momento los millones de peruanos que rechazamos el fraude, que no aceptamos el comunismo en nuestro país y que luchamos por la libertad enfrentamos a un monstruo que como la mitológica Hidra tiene muchas cabezas que se deben cortar. Nuestra lucha es desigual. Pero aún vive la promesa de la vida peruana.
