Por: Uri Landman
La semana pasada se vivieron en Cuba las mayores protestas en contra del régimen comunista de Cuba desde la crisis de los noventa. Miles de personas se volcaron a las calles de manera espontánea para protestar de manera pacífica por las graves carencias que sufre el pueblo cubano. Dentro de las penurias que tienen que pasar mencionamos: la falta de alimentos, medicinas, oportunidades laborales, etc. y por si esto fuera poco, largos cortes del suministro eléctrico como viene ocurriendo en el poblado habanero, San Antonio de los Baños entre otros.
La última vez que se habían visto protestas de esta magnitud fue en 1994 con el llamado “Maleconazo” cuando los cubanos salieron a protestar por la precaria situación económica previa a la crisis de los balseros.
Como buen comunista, el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, salió rápidamente en televisión nacional a culpar a los Estados Unidos y al embargo económico de ese país por todos los males de la isla. Lejos de ofrecer soluciones reales a los problemas que vive el pueblo cubano, Díaz-Canel advirtió que “no se permitirán provocaciones” además de agregar “la calle es de los revolucionarios”, “aquí ningún gusano ni contrarrevolucionario va a tomar las calles” y finalmente exhortó a los fieles a la revolución a salir a las calles para defenderla.
Sin que podamos decir que nos sorprende, los caviares, izquierdistas y comunistas peruanos, se volcaron inmediatamente a los medios para culpar a los Estados Unidos por las protestas del pueblo contra la dictadura comunista de Cuba.
Por ejemplo la izquierdista Verónika Mendoza, publicó en su cuenta de Twitter: “Solidaridad con el pueblo cubano que enfrenta una crisis agravada por la pandemia y el criminal bloqueo impuesto por USA”. Álvaro Campana, secretario general de Nuevo Perú publicó: “A ver, el pueblo cubano hace décadas sufre un criminal bloqueo como resultado de una revolución inconveniente para Estados Unidos”. Lenin Checo, congresista de Frente Amplio publicó: “Como ciudadano de izquierda, dirigente del partido, pienso que el principal problema de Cuba es la liberta del pueblo cubano con respecto al bloqueo…”. El comunista Guillermo Bermejo publicó: “Más de seis décadas de bloqueo, terrorismo e intervenciones y no entienden que la dignidad de Cuba está por encima de un puñado de gusanos que le hacen el juego al imperialismo”. No podemos dejar de mencionar lo que publicó la digna representante de los comunistas de Juntos por el Perú, Sigrid Bazán, sobre las protestas del pueblo cubano y la brutal represión, que ya deja un muerto, por parte del gobierno comunista: NADA.
Lejos de reconocer el fracaso de la revolución cubana y de la catástrofe económica que ha traído al pueblo el modelo comunista impuesto por el dictador Fidel Castro, los izquierdistas siguen culpando a los Estados Unidos por su debacle. ¿Acaso la grave crisis económica que sufre Cuba es culpa de los Estados Unidos? Por supuesto que no. Si no me creen, entonces analicen el caso de Taiwán que sufre un bloqueo por parte de China hace décadas. La falta de alimentos, medicinas, energía, etc. se debe al modelo económico comunista implementado por Castro después de la revolución cubana que derrocó a Fulgencio Batista en 1959.
El periodo de lucha armada de la revolución se inició el 25 de noviembre de 1956 cuando 82 guerrilleros, dirigidos por Castro, zarparon de México en el yate Granma con destino a Cuba. A pesar de sufrir una derrota inicial en Alegría de Pío, pudieron internarse en una zona de difícil acceso, Sierra Maestra, en donde iniciaron la lucha armada. Desde fines de 1956 hasta fines de 1958 el ejército revolucionario de Castro fue creciendo en cantidad de hombres, armas y acciones armadas a través de la isla. Para diciembre de 1958 la debacle de la dictadura de Batista parecía inevitable. El 28 de diciembre, las milicias comandadas por Ernesto “Che” Guevara iniciaron el ataque contra la ciudad de Santa Clara. El 31 de diciembre, cuando los rebeldes tomaron el tren blindado que el gobierno había enviado para fortificar la ciudad, Batista decidió huir a Santo Domingo junto con el presidente electo Andrés Rivero Agüero, quedando el país acéfalo.
El 1 de Enero de 1959, con la entrada de las tropas del Movimiento 26 de Julio comandadas por Camilo Cienfuegos y Che Guevara a la Habana y de manera casi simultánea la entrada a Santiago de Cuba de Fidel Castro, marcó el triunfo de la revolución.
Una vez en el poder, los guerrilleros formaron un nuevo gobierno. Por más que antes de ganar, Castro había prometido celebrar elecciones generales en el término de un año, lo cierto es que ello nunca sucedió. Fidel Castro tomó el poder e inició los juicios revolucionarios, proceso por el cual fusilaron a cientos de opositores a su régimen comunista. En mayo de 1959, Castro firmó la prometida ley de “reforma agraria” que expropió y nacionalizó plantaciones e ingenios azucareros, además de industrias, hoteles y empresas extranjeras. Gran parte de la clase alta y media tuvo que abandonar el país, instalándose muchos de ellos en Estados Unidos.
El gobierno comunista cubano, se adueñó de todos los medios de producción de la isla. Convirtió su económica en centralista, burocrática y por ende altamente ineficiente. Durante décadas solamente se podía trabajar legalmente en los puestos de trabajo que bridaba el estado. Para ilustrar una de las grandes distorsiones de la economía, basta decir que el salario estatal es inferior al costo de la canasta básica alimentaria. En Cuba un doctor gana casi lo mismo que un trabajador de limpieza, lo que desincentiva la productividad y el progreso.
Pero lejos de aceptar las carencias del sistema, el gobierno cubano como buen comunista, siempre culpa al imperialismo yanqui de sus fracasos e ineptitud. Por ejemplo, lejos de privatizar las empresas públicas y volverlas rentables, o darle libertad a sus ciudadanos para que puedan crear empresas y por ende riqueza, culpa a los Estados Unidos del “embargo económico”, por medio del cual compañías americanas no pueden comerciar con el gobierno cubano. Pregunto: ¿acaso Cuba no puede comerciar con los otros 200 países que hay en el mundo, como en realidad lo hace con Canadá y la Unión Europea por ejemplo? sin embargo, responsabiliza a los norteamericanos de la quiebra de su económica.
Otro ejemplo, es la emigración de cubanos hacia Estados Unidos. Según el gobierno cubano la Ley de Ajuste Cubano es una “ley asesina” por cuanto alienta a muchas personas a cruzar el estrecho de la Florida y morir en el intento. Lejos de reconocer que los cubanos salen de su país por la miseria y el hambre, culpan a los Estados Unidos por darles la oportunidad de tener una mejor calidad de vida. Típico de los comunistas.
Tengamos presente lo que dijo la periodista disidente cubana Yoani Sánchez a raíz de las últimas manifestaciones masivas en contra del régimen comunista: “Fuimos a las calles porque teníamos hambre y teníamos tanta hambre que nos comimos el miedo”.
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