Cultura

DEMANDAN A BIDEN POR POR ORDEN EJECUTIVA QUE COLOCA HOMBRES EN DORMITORIOS Y DUCHAS PARA MUJERES EN LAS UNIVERSIDADES

El presidente Joe Biden está siendo demandado por una universidad cristiana que dice que su orden ejecutiva sobre “identidad de género” viola su libertad religiosa al obligarla a que a sus estudiantes a compartan sus dormitorios y duchas con miembros del sexo opuesto.

En una demanda federal presentada el jueves en el tribunal de distrito de Missouri, el College of the Ozarks, una universidad cristiana privada en Point Lookout, Missouri, dice que una directiva emitida por el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano es inconstitucional e infringe sus derechos religiosos.

También nombrados como acusados ​​están la secretaria de HUD nombrada por Biden, Marcia Fudge, y la secretaria adjunta de HUD, Jeanine Worden.

El tema es una controvertida orden ejecutiva de enero titulada “Prevención y lucha contra la discriminación por motivos de identidad de género u orientación sexual”, que HUD invocó un mes después para exigir que todas las instalaciones de vivienda universitaria deben cumplir con las nuevas reglas de género.

Esto significa que a los hombres que se identifican como mujeres se les debe permitir vivir en dormitorios de mujeres y usar duchas comunes en los baños de mujeres.

Alliance Defending Freedom, un grupo de defensa cristiano conservador, está representando al College of the Ozarks en su demanda por discriminación.

En un comunicado , la ADF dijo que el reconocimiento anticientífico de la administración Biden de la identidad de género autodeclarada de las personas transgénero “obliga a las escuelas religiosas a violar sus creencias al abrir dormitorios femeninos a hombres biológicos y viceversa”.

Julie Marie Blake, asesora principal de la ADF, dijo que no se debe permitir que el gobierno elabore su propia definición de género para impulsar agendas políticas de izquierda que niegan y borran las diferencias biológicas entre hombres y mujeres.

“El gobierno no puede ni debe obligar a las escuelas a abrir dormitorios para niñas a los hombres basándose en su redefinición inapropiada y motivada políticamente de ‘sexo’”, dijo Blake en un comunicado.

“Las mujeres no deberían verse obligadas a compartir espacios privados, incluidas las duchas y los dormitorios, con los hombres, y las escuelas religiosas no deberían ser castigadas simplemente por sus creencias sobre el matrimonio y el sexo biológico”.

Dijo que la incesante defensa de las personas transgénero de la administración Biden discrimina a las mujeres y los cristianos al subvertir la ciencia y negar hechos biológicos inmutables.

“La extralimitación del gobierno por parte de la administración Biden continúa victimizando a mujeres, niñas y personas de fe al destripar sus protecciones legales, y debe ser detenida”, dijo Blake.

Jerry Davis, presidente del College of the Ozarks, dijo que su escuela defiende la creencia cristiana de que el género no se puede cambiar, y la escuela opera sus dormitorios en consecuencia.

Dijo que la orden ejecutiva de Biden constituye una extralimitación del Gran Gobierno y es un ataque directo al cristianismo.

“La libertad religiosa está siendo atacada en Estados Unidos, y no nos quedaremos al margen y observaremos”, dijo Davis en un comunicado.

“Amenazar la libertad religiosa es amenazar a los propios Estados Unidos. College of the Ozarks no permitirá que los políticos erosionen este derecho estadounidense esencial o los ideales que dieron forma a la fundación de Estados Unidos “.

En una conmovedora publicación de blog , Sarah Kramer de la ADF dijo que, como madre, está preocupada por el futuro de su hijo debido a la escalada de ataques de izquierda contra el cristianismo .

Recordó lo emocionada que estaba en 2009 cuando su propia madre la llevó a la universidad por primera vez, y cómo se preguntaba quién sería su compañera de cuarto y si se llevarían bien.

Ahora, dijo Kramer, las mujeres que van a la universidad deben preguntarse si sus compañeros de cuarto serán hombres.

“Como madre que ahora soy yo misma, no me sentiría cómoda dejando a mi hijo en esa situación”, escribió.

“El gobierno claramente está traspasando sus límites aquí. Después de todo, nuestra Constitución protege el derecho de las instituciones religiosas a operar de acuerdo con sus creencias. … El gobierno no pertenece a nuestros dormitorios “.

 

© The Western Journal

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