Por: Mario Linares
Primer tramo. 1834. Chile ya independiente no tenía conciencia de nación sino hasta que Diego Portales vislumbró que era imperativo evitar la Confederación peruano boliviana a fin que no se prolongue y acentúe la ascendencia política virreinal de Lima sobre Santiago, cuestión que se daría inevitablemente por la inmensa fortaleza de la Confederación al explotarse posteriormente los grandes recursos de los territorios fusionados. La Confederación se frustró debido al ejército peruano chileno, restaurador del statu quo dejado por Bolívar, evitándose la posterior hegemonía peruana en el Pacífico, concretándose así la doctrina portaliana.
Segundo tramo. La expedición naval española, sufre en 1865 la captura del buque Nuestra Señora de la Covadonga por parte de la armada chilena, siendo finalmente derrotada en el Callao por acción de las baterías de tierra peruanas, el 2 de mayo de 1866.
Tercer tramo. 1879. Combate de Iquique. Huye la Covadonga perseguida por la Unión, encallando esta última. Al ver los humos del Huáscar que demoró rescatando náufragos de la hundida Esmeralda, la Covadonga continua su huida, logrando su cometido.
Cuarto tramo. Combate de Angamos. Sucumbe el Huáscar ante toda la flota chilena, incluida la Covadonga. Es capturado y pasa a la flota enemiga, bombardeando luego Arica y bloqueando el Callao.
Quinto tramo. Durante la ocupación chilena, la Covadonga que bloqueaba el puerto de Chancay, es hundida mediante un bote bomba.
Sexto tramo. En la actualidad viene construyéndose un mega puerto en Chancay donde el ruido de los trabajos ha interrumpido el reposo de la Covadonga y también el de Portales. El enorme puerto hub de Chancay trae por los suelos la visión geopolítica portaliana de dominio de Valparaíso sobre El Callao.
El Almirante Grau está algo complacido. No solo el Huáscar chileno nunca mantuvo el perfil del mando peruano, pasando a ser un barco mal marinero que salió haciendo agua en la batalla de Arica. La evocación de un Inca imperial se acabó. En la guerra del Pacífico pasó a tener la sencillez de un cacique mapuche. Es que los barcos son lo que son sus comandantes.
El Huáscar está donde debe estar. Surto en Talcahuano está bien cuidado y es objeto de respeto debido a los marinos peruanos y chilenos muertos en su cubierta.
Grau está presente en la memoria y es orgullo de todos los peruanos correspondiéndole honores todos los 8 de octubre, especialmente a las 9.50 am, hora en donde en su puente de mando se hace inmortal. ¡Honor y gloria al Gran Almirante Miguel Grau Seminario!
