Por: Erus Símera
Y sigue con mucho gusto
como lo hace un alma en pena
arrastrando una cadena
enmohecido, vetusto
chamullando que lo justo
es seguir de comechado
que no importa lo juzgado
sino solo el corazón.
Aldito se hace el huevón
por seguir de magistrado.
Y sigue pues no se ha ido
y no se va porque no
que el TC no lo botó
que no se acabó el partido
que solo se ha suspendido
la sentencia cuyo proceso
determinaba su deceso
como miembro de la junta.
Con Inés, su waiki y yunta
no le harán caso al Congreso.
Y sigue también Inés
muy pretérita y sin cura
pues dejó su dentadura
sus enaguas, sus corsés
y dice que es un traspiés
pero sigue despachando
pero que le avisen cuándo
su cumpleaños celebrar.
Inés quiere festejar
sus ochenta años cobrando.
Y sigue por conchudez.
¡Qué pareja de asaltantes!
así son los militantes
de la misma caviarez
cuya farsa y “gorritez”
es la que en versos, fumigo.
Se merecen por castigo
que la misma población
les grite a todo pulmón:
-¡Y vuelta la mula al trigo!
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